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Si, es complicado. Lo sabemos. La primera reacción al ver un insecto, siempre es la de asustarse y correr del sitio donde estemos. Pero claro, si estás dentro del coche, es difícil huir. Tenemos que pensar que nuestra seguridad al volante es mucho más importante que el miedo que pueda producirte un bicho.
Ante todo, intenta guardar la calma. Intuitivamente reaccionarías haciendo movimientos bruscos, algo que te hará desviar completamente tu atención. Pero aquí es donde tienes que sobreponerte a la situación y aguantar (como puedas).
Si va alguien de copiloto, estás de suerte. Este será el encargado de abrir las ventanas e invitar al enemigo a irse. Pero si vas solo, te toca a ti solucionar el problema. Ante todo, no hagas aspavientos, abre todas las ventanillas del coche, reduce la velocidad y pon el aire acondicionado. Esto facilitará la salida del insecto del vehículo y podrás continuar tu camino con tranquilidad.
Si siguiendo estos pasos, no consigues que salga del coche, para en algún lugar seguro lo antes posible. Una vez allí podrás abrir todas las puertas y ventanas para conseguir que el animal salga del interior del vehículo.
Si tienes mala suerte y el insecto te pica, detén el coche lo antes posible para comprobar los daños que haya podido causarte. Doble razón si eres alérgico, ya que podrías necesitar la intervención de un médico. Bajo ningún concepto sigas conduciendo, ya que los efectos de la picadura pueden aparecer pasados unos minutos. Y el dolor o picor puede impedirte seguir al volante con seguridad.
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