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Por fin ha llegado el calor y nuestra mente está más que nunca puesta en el verano. Las vacaciones están a la vuelta de la esquina y ,por eso, hay que tener en cuenta una serie de factores para que los imprevistos no nos pillen por sorpresa. Durante este periodo solemos relajarnos más y tomarnos la vida con calma, pero al volante no deberíamos perder las buenas costumbres, ya que los comportamientos indebidos pueden ser sancionados con multas. Os hacemos un repaso de las más comunes:
Las chanclas están muy bien para ir a la playa o la piscina, pero no para conducir. Por ello, la norma dice que hay que llevar un calzado apropiado que sujete el pie y que no se pueda enganchar en los pedales. El hecho de no llevar un calzado que cumpla estos requisitos o ir descalzo, podría suponer una sanción de 80 euros.
Como sabemos, el calor aprieta, y la necesidad de ir fresco puede llevarte a quitarte la camiseta mientras estás conduciendo. Error. Esto puede acarrear una multa de 80 euros y daños personales, puesto que en caso de accidente, el riesgo de sufrir quemaduras o rozaduras por la actuación del cinturón de seguridad es mucho más probable.
Aunque parezca una acción sin mayor importancia, tienes que tener en cuenta que conducir con el brazo por fuera del habitáculo es bastante peligroso y puede suponer una multa de hasta 80 euros. ¡Las manos al volante!
Es importante hidratarse, pero no conviene hacerlo mientras estés conduciendo, ya que comer o beber puede ocasionar una distracción y la multa puede llegar hasta a 200 euros más la retirada de dos puntos del carnet.
Esto es peligroso todo el año, pero en la estación de verano en concreto el riesgo de incendio es mucho mayor, por lo que es una sanción previsible y totalmente justa. Podría suponer una multa de 200 euros y la retirada de 4 puntos del carnet. Si lo tienes como una práctica habitual… ¡ya es hora de que te vayas concienciando!
Está claro que en la época estival vamos ligeritos de ropa y siempre llevamos encima lo mínimo, sobre todo si vas a la playa o piscina. Pero recuerda llevar bañador, toalla y… ¡el permiso de conducir!
Si te has ido a la playa y la arena ha cubierto tu matrícula… procura limpiarla. Si por un casual deja de ser visible y un agente lo ve, podría ponerte una multa de hasta 200 euros.
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