Trucos y consejos para comprar un coche de segunda mano

¿Coche de segunda mano o vehículo de ocasión?

En España, como consecuencia directa de la crisis, se han llegado a vender más del doble de coches usados que nuevos. Sin embargo, en la mente del comprador existe mucha incertidumbre y grandes dudas que se pueden generar con respecto al estado de un vehículo de segunda mano. Y ahí es donde el vehículo de ocasión puede convertirse en una alternativa interesante a tener en cuenta.

Los vehículos de ocasión son coches cuya antigüedad media no supera los 5 años. En los de segunda mano, más del 50% superan los 10. En este sentido, algunos expertos aconsejan poner especial atención (y precaución) en ofertas de vehículos con más de seis años o con precios inferiores a 6.000 euros. Pero, independientemente de estos factores, a la hora de buscar un coche usado, siempre se debe comprobar de primera mano el estado real de cada vehículo, especialmente si corresponde a un particular.

¡Atención, atención… por dentro!

Lo primero que se ha de revisar es el libro de mantenimiento. En él figuran registradas las revisiones y reparaciones del vehículo, así como el kilometraje y si ha superado o no las ITV, entre otra información de interés. Por ello, ante la mínima sospecha de que algún dato puede ser fraudulento la recomendación pasa por seguir buscando más opciones o acudir a un experto para que lleve a cabo la revisión del vehículo.

Dos de las trampas más frecuentes entre los vendedores de este tipo de vehículos son la manipulación del cuentakilómetros y la ocultación de los testigos de avería:

1. Para detectar la primera (ilegal, por cierto), una de las pistas es comprobar el estado de los asientos. Si están muy desgastados suele ser señal de que el vehículo se ha utilizado mucho. Sí, la cantidad de kilómetros que refleja el contador ha de corresponderse con el envejecimiento de los asientos.
2. La ocultación de los daños escondiendo los testigos de avería o camuflando el aviso luminoso pueden detectarse prestando atención al cuadro de mandos: si se observa que ha sido manipulado o existen señales de haberse desmontado puede significar que el coche presenta algún daño.

¿Y por fuera?

Otro factor a tener en cuenta es la carrocería. Además de ser un elemento que parece puramente estético, lo cierto es que es el primer elemento de seguridad que posee un coche. Un truco para averiguar si el vehículo ha tenido abolladuras ocultadas con masilla es pasar un imán por la superficie de la que se sospeche para ver si adhiere o no. Si no se produce la atracción del imán hacia la chapa es porque ha sido reparada y la masilla cubre algún golpe. En este mismo sentido de “ahorro” puede que hayan escatimado pintura en el arreglo de la chapa, mezclando pintura con disolvente y un poco de barniz. En este caso, el tiempo es el que ofrecerá la respuesta ya que a largo plazo esta zona se desgastará y pasará a ser visible.

Estos son algunos trucos sencillos que te ayudarán a descubrir las técnicas con las que pueden intentar engañarte cuando estás buscando un vehículo de segunda mano. No queremos despedirnos sin darte a conocer una aplicación muy útil que te ayudará en tu búsqueda. Se llama Matrículas y utiliza datos de la DGT actualizados para informarte del año y país en que fue matriculado por primera vez el coche, así como el fabricante. Podrás acceder a toda la información tan solo introduciendo el número de bastidor. ¿Sencillo, verdad? ¡Información fiable al instante!

Además, si el conductor es usuario de :DriveSmart, sabes que se preocupa por cuidar su coche, así que tranquilidad doble al volante, ¿verdad?

¡Te deseamos una buena y productiva búsqueda!